Actas del Congreso Nacional de Tecnología Aplicada a Ciencias de la Salud Vol. 5, 2023
Introducción: La violencia en la relación de pareja es un evento que impacta en la población universitaria y representa un problema de salud mental. Planteamiento del problema. El problema de la violencia es un indicador de la inequidad existente entre hombres y mujeres, no es ajena a la propia universidad. Método: Estudio cuantitativo, descriptivo, transversal. Muestra 362 estudiantes universitarias; se aplicó el Cuestionario de Violencia en el Noviazgo (CUVINO) como instrumento de diagnóstico; se respetó el consentimiento informado y el anonimato. Resultados: Los participantes sostienen una relación de pareja y manifestaron que "Frecuentemente", "Habitualmente" o "Casi Siempre" han vivido violencia de pareja. Conclusiones: Existe una relación entre la violencia emocional y el género en las estudiantes universitarias en sus relaciones socio-afectivas.
Palabras Claves: Violencia, Emocional, Estudiantes
Introduction: Violence in the university couple relationship is an event that impacts the university population, which represents a mental health problem. Problem Statement. The problem of violence is an indicator of the existing inequality between men and women, it is not alien to the university itself. Method: Quantitative, descriptive, cross-sectional study. Sample 362 university students; Questionnaire was applied Dating Violence Questionnaire (CUVINO) as a diagnostic tool; Informed consent and anonymity were respected. Results: The participants maintain a relationship and stated that "Frequently", "Usually" or "Almost Always" they have experienced partner violence. Conclusions: There is a relationship between emotional violence and gender in university students in their socio-affective relationships.
Key words: Violence, Emotional, Students
La violencia emocional en la relación de noviazgo es un evento que ha adquirido relevancia en la población estudiantil universitaria y representa un problema de salud mental. La violencia emocional o psíquica comprende al uso de gritos, amenazas, daño, aislamiento social o físico, celos, intimidación, insulto, crítica, ignorar, ridiculizar, usar la mentira, romper promesas o insultar. en México la encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) sobre violencia en el noviazgo, reveló que 6.79% de los jóvenes señalan haber sufrido violencia física en los últimos doce meses recientes, incrementándose a 39.38 % al referirse a la violencia emocional. en los últimos veinte años, los estudios sobre violencia escolar se han multiplicado en las bases de datos especializadas [1] [2].
La violencia en general se define como «un evento que ocurre con gran fuerza, como un sismo o un choque de trenes, pero en lo relacionado a las interacciones sociales se refiere a la aplicación de agresión intensa que impone daños graves a personas o sus propiedades». También se define como «utilización de esa fuerza lesiva contra lo que se considera natural, justo, moral o legal [3]. En todo caso la violencia no es una conducta aceptable en las relaciones humanas y más aún en el reconocimiento de los derechos humanos primordiales de las personas.
La violencia en cualquier momento de la vida de las personas hace referencia a comportamientos transgresores o punitivos que la mayor parte de las veces afecta las relaciones e interacciones positivas que favorecen la vida académica y escolar. La conducta violenta en la mayor parte de los casos corresponde con los procesos sociales de aceptación, pertenencia, estatus, poder, reconocimiento. En el caso de los hombres muchas de las prácticas rituales e iniciáticas corresponden a la emergencia de conductas violentas. La violencia puede ser de carácter adaptativo que tiene una función de supervivencia y se presenta en situaciones esperadas. La violencia como agresividad social se presenta en los entornos menos favorecidos en donde la lucha por los espacios o recursos es constante, ejemplo de ello el ámbito escolar donde se ubican el agresor y la víctima [4].
La violencia mal adaptativa tiene especial interés desde el punto de vista de la salud mental y supone una falla en los mecanismos internos de regulación y control psicológico [5].
En los últimos años ha crecido el interés por estudiar las conductas violentas y antisociales y su relación con las conductas de riesgo (consumo de drogas). Sin embargo, es el Acoso escolar el que puede estar asociado con las conductas violentas el rendimiento académico, el robo y el consumo de alcohol o drogas [6].
La violencia puede gestarse en el noviazgo, etapa en que los involucrados se espera den lo mejor de sí; sin embargo, también muchas veces no ocurre así y se hace presente la violencia en sus diversas formas. Algunos autores afirman que a mayor edad o mayor nivel escolar es menor la probabilidad de dependencia emocional [7]. Sin embargo, el estudio realizado en la Universidad del Estado de México (UAEM) [8], revela que no existe una relación significativa entre la duración del noviazgo y la aparición de la violencia. Señalado que es probablemente el ambiente familiar en que se forman los valores donde se gestan los patrones que dan pie a la violencia en el noviazgo.
Tipos de Violencia
La mayor parte de los estudios sobre violencia en el noviazgo se refieren a violencia física; sin embargo, ésta puede tener carácter psicológico y sexual; adquiriendo un carácter de género [9].
La violencia física corresponde a actos concretos de pegar, empujar o ejercer fuerza física para afectar la integridad de la persona agredida (torceduras, pellizcos, bofetadas, patadas, lesiones internas, provocar aborto).
La violencia Emocional o psíquica corresponde al uso de gritos, amenazas, daño, aislamiento social o físico, celos, intimidación, insulto, crítica, ignorar, ridiculizar, usar la mentira, romper promesas o insultar, descalificar, desvalorizar, humillar, insultar, criticar, amenazar, chantajear, generar temor y terror sobre uno de los miembros, para controlar y aislar mediante restricción de las salidas y/o menospreciar en público, lo cual puede propiciar baja autoestima, trastornos alimentarios, alteraciones del sueño; enfermedades gástricas, úlceras, dolor de cabeza y muscular [10], [11], [12].
La violencia sexual corresponde a ejercer presión física o emocional para imponer relaciones sexuales; ya sea por presión, coacción, intimidación.
La violencia económica se refiere a ejercer control en el manejo del dinero o la propiedad y en general cualquier recurso compartido en una relación de equidad.
Nuevas formas de violencia han emergido a partir del uso extensivo de las redes sociales como el llamado bullying electrónico u acoso cibernético [13],[14].
El objetivo del presente estudio es identificar las características de la violencia emocional en el noviazgo en estudiantes universitarios de la Facultad de Enfermería y Obstetricia de la UNAM.
Se trata de un estudio descriptivo, prospectivo, transversal y no experimental. El universo quedo constituido por la Facultad de Enfermería y Obstetricia de la UNAM. Las unidades de observación alumnos de las carreras de Licenciado en Enfermería y Licenciado en Enfermería y Obstetricia. Los criterios de inclusión fueron: Alumnos regulares, inscritos para el ciclo 2020-1. Los criterios de exclusión: Alumnos no regulares, alumnos de intercambio. Los criterios de eliminación: Alumnos que decidieran no participar en el momento de la aplicación del instrumento. La muestra fue convencional, de carácter no estadístico con una n de 322.
Para la recolección de datos se utilizó el cuestionario de violencia de pareja (CUVINO) para población adolescente y joven con 42 reactivos tipo Escala de Likert; validado en población hispana y latina con fiabilidad total de la escala (Alpha de Cronbach de 0.932) y de las subescalas (Alpha comprendida entre 0.58 y .0.81, con 6 factores por encima de 0.70) indican unas cualidades psicométricas suficientes para considerar una herramienta de evaluación válida y confiable [15]; así como suficiente para considerarla como instrumento de diagnóstico en la violencia emocional de estudiantes universitarias.
El procesamiento estadístico fue a través de estadística descriptiva del programa SPSS versión 20. La ética del estudio considero el consentimiento informado y el anonimato de los datos.
Los participantes se destacaron por ser primordialmente mujeres, se entiende debido a que en la disciplina de enfermería es el género que elige la profesión.
Figura 1. Género estudiantes Universitarias (os)
El porcentaje de edad de quienes participaron se ubicó en un 44% corresponden al grupo de 18 a 20 años y el 39% de 21 a 23 años.
Figura 2. Porcentaje de edades de estudiantes universitarias (os)
Otro elemento que está presente en el ejercicio de la violencia de pareja es el argumento de que si trabaja entonces no presta atención a la relación, situación que detona en violencia.
Figura 3. Trabajo Remunerado
Violencia en el Noviazgo
Del análisis de los resultados del instrumento CUVINO y de la asociación de las dimensiones, destaca la relación del desapego y trabajo como forma de violencia con la probabilidad dos veces mayor para quienes respondieron en concordancia los reactivos referidos a esta forma de maltrato.
Para el caso de la violencia física y la actividad laboral la probabilidad es seis veces mayor para quienes trabajan y lo mismo sucede con relación al maltrato por situaciones de género que casi es de dos y medio veces mayor probabilidad.
La violencia instrumental alcanza una probabilidad de seis y medio con respecto a la edad. (ver tabla 1).
Tabla 1. Asociación de dimensiones CUVINO
Asociación | Significancia LR chi2 |
Observación |
---|---|---|
Desapego y trabajo |
4.17 | Las personas que trabajan tienen casi 2 veces más probabilidad de violencia de desapego. |
Violencia de Trabajo y Género | 5.61 | Las personas que Trabajan tienen casi 2.5 veces más probabilidad de vivir violencia de género. |
Violencia física y trabajo | 9.80 | Las personas que Trabajan tienen casi 6 veces más probabilidad de violencia física. |
Violencia instrumental y edad | 10.87 | Las personas de 20 años tienen casi 6.5 veces más probabilidad de experimentar violencia instrumental. |
En el estudio se encontró que la mayor parte de los alumnos participantes muestran de las ocho dimensiones exploradas: desapego, humillación, violencia sexual, coerción, violencia física, violencia de género, castigo emocional, violencia instrumental, un nivel bajo de violencia; sin embargo es preocupante el nivel más alto de compromiso de la violencia correspondiente al desapego que muestra en su reactivo #6 un poco más del 70 % y el reactivo #42 correspondiente a la coerción con el que alcanza 75 %.
Finalmente hay que señalar que el castigo emocional, el maltrato y la coerción no mostraron significancia asociada con el sexo, trabajo o edad de los participantes.
A través de la aplicación del instrumento CUVINO, se encontró una alta probabilidad de que la dimensión de desapego esté relacionada con la violencia emocional de la muestra estudiada, sin embargo, es necesario reconocer que en cada contexto las diversas dimensiones de la violencia pueden hacerse manifiestas e incluso prevalentes.
Así mismo se encontró una fuerte relación en quienes trabajan y el uso de la violencia de género manifiesta; es decir se burla de las mujeres u hombres en general, tiene pensamientos de inferioridad respecto de los demás, ha insultado, bromea o desprestigia y hace sentir que se violenta la sexualidad.
Los resultados coinciden con el estudio de Cortés-Ayala, et al [ 16], quienes realizaron un estudio sobre la prevalencia de conductas de violencia o maltrato de pareja (dating violence), y las diferencias por sexo y nivel de estudios a través de los ocho factores del cuestionario CUVINO en una muestra de 3495 jóvenes mexicanos de los cuales 55.2% eran preuniversitarios y 44.8% universitarios. Los resultados mostraron una elevada prevalencia de victimización, especialmente en el tipo de maltrato de tipo psicológico (desapego, coerción, humillación), sexual y por género; las adolescentes reportan más perpetración de violencia en el noviazgo y menos victimización, tanto en preuniversitarios como en universitarios. Los varones tienen una percepción de maltrato mayor, especialmente de tipo físico, castigo emocional e instrumental, aunque no son las conductas de mayor ocurrencia.
De la Villa Moral, García, Cuetos, Sirvent[6], mostraron que los jóvenes victimizados presentan mayor dependencia emocional y menor autoestima que los no victimizados; en función del género, se encontró que las adolescentes víctimas de violencia tuvieron menor autoestima y los varones ejercían con más frecuencia procesos de acomodación y de manipulación; se comprobó también una tasa superior de violencia y dependencia emocional en los estudiantes de Educación Secundaria frente a los universitarios.
El ejercicio de la violencia en el noviazgo y sus diversas modalidades se encuentra presente en la FENO-UNAM en un nivel bajo; sin embargo, los resultados orientan a considerar de mayor frecuencia al desapego y la coerción como formas de violencia hacia donde se deben enfocar los programas de prevención y Consejería en Salud Sexual y Reproductiva. El cuestionario CUVINO resultó ser un instrumento de diagnóstico fiable.
Dadas las características de los alumnos de la escuela (Porcentaje mayor de mujeres que de hombres) es mucho más manifiesta la referencia de la violencia tanto psicológica como de género. La propia elección de la carrera en el contexto universitario hace de la formación una oportunidad de ruptura con los patrones prevalentes de violencia existentes en México y de forma particular a la llamada violencia de género.
El estudio de la violencia en el noviazgo se hace necesario en el entorno escolar no solo por su carácter dinámico sino por los cambios que experimenta en su manifestación cualitativa y cuantitativa.
El nivel de violencia manifiesto del estudio orienta a la realización de programas preventivos cuya finalidad estaría priorizando los aspectos de autoestima y de enfoque de género que pueden incidir como factores protectores de la violencia en el noviazgo.